Por Mónica Peón

En junio se celebra el día en contra de la piratería a nivel mundial. En honor a eso, quiero hablar de un fenómeno muy recurrente en el mundo del yoga Iyengar, un tema de ética que me tiene intrigada: Maestr@s que se llaman Iyengar para promocionarse pero en realidad ni conocen el método, ni han tomado clases, ni les interesa mucho, obviamente no están certificados ni reconocidos por RIMYI, pero les gusta para su marketing porque el nombre Iyengar tiene mucho reconocimiento a nivel internacional y les da credibilidad. Quieren usar el nombre sin asumir el compromiso que conlleva.
Para ser un maestro iyengar certificado se requieren años de preparacion y pasar exámenes rigurosos, por lo que solo personas muy preparadas y que han estudiado mucho lo obtienen. Además continúan estudiando toda la vida.
¿Cuál es el beneficio de vender gato por liebre? ¿Por qué lo hacen? ¿Cómo se quieren beneficiar con el engaño, y a fin de cuentas, a quién quieren engañar? ¿Me pregunto si en otros métodos sucede lo mismo y con esta frecuencia?

Cuando uno compra una marca pirata en lugar de la auténtica, ¿cuáles son las ventajas y cuáles los riesgos? Ventaja: que es más barata, Riesgos: la calidad no es la misma. En el yoga ocurre lo mismo, y lo que se pone en riesgo es la propia salud, porque es muy probable que el maestro no tenga ni idea de lo que está haciendo.

En el manual de certificación Iyengar dice:

UN MAESTRO DE YOGA IYENGAR DEBERÁ…

-Ser un alumno de Yoga Iyengar y deberá serlo siempre.
-Tener un claro entendimiento de la materia y ser capaz de demostrar y expresarse de manera efectiva.
-Observar de manera prudente los Yamas y Niyamas.
-Ser honesto y compasivo.
-Enseñar de manera responsable.
-Llegar preparado para dar su clase.
-Enseñar desde el corazón, no solamente desde el cerebro.
-Ser un buen ser humano.

Cuando uno recién se interesa por el camino del yoga, empieza de forma fortuita, al azar, porque una amiga te recomienda a algún maestro, o comienzas a ir a clases en el lugar y el horario que te conviene cerca de tu casa. Si vives el un lugar pequeño, a lo mejor es el/la únic@ maestr@. A lo mejor te quedas porque habla bonito, es guap@, y te hace sentir bien. ¿Pero es eso yoga? Con tantas formaciones express de maestros, es muy difícil saber cuál es la verdadera preparación del maestro con el que estamos y si lo que estamos aprendiendo es yoga. Al principio ni te lo cuestionas porque no tienes con qué comparar.

Cuando tienes un poco más de experiencia, a lo mejor ya probaste clase con varios maestros y métodos y descubres que existe el Yoga Iyengar y te llama la atención ¿Pero cómo puedes saber si la escuela o maestro sigue el método y no es pirata?

Aquí te doy unos tips:

1. Su nombre se encuentra en la lista de maestros certificados por RIMYI: https://bksiyengar.com/modules/Teacher/teacher.asp?Country=Mexico , puedes buscarlo por país y por ciudad. En el caso de México, puedes consultar también la página de AMYI: https://admon.amyi.site/maestros_nv.php Los maestros Certificados siempre pertenecen a una asociación, ya que para usar el nombre Iyengar, al ser una marca registrada, tienen que pagar membresía a la asociación y uso de marca anual a RIMYI.
2. En la publicidad y la práctica no mezcla métodos: Si dice Yoga Iyengar, Vinyasa, Reiki, Ashtanga, flow, Kundalini, yoga funcional y Biomecánica, entonces no es Iyengar.
   Los maestros Iyengar para llamarse así, asumen un código de ética y de conducta donde se comprometen a no mezclar, a seguir la metodología de Iyengar lo más fiel a las enseñanzas de BKS Iyengar, a tener un código de vestimenta y de conducta con los alumnos fiel a Yamas y Niyamas.
3. Es conocido en la comunidad Iyengar local (en general, todos hemos cruzado caminos en algún momento, ya que nunca terminamos de prepararnos y coincidimos en cursos).
4. Tiene un maestro Iyengar y sigue tomando clases, nunca deja de ser estudiante.
5. Sigue los lineamientos del manual  para certificación Iyengar, que puedes consultar en la página de AMYI.

Estudiar los libros Iyengar está muy bien, Iyengar mismo decía que era mejor seguir un buen libro que a un mal maestro. Pero eso no los hace maestros Iyengar, ya que cuando trabajas de cerca con un mentor, hay muchas cosas que no están en los libros y que te enseña el guía: Aunque la información (ya sea la que encontramos en los libros o en internet) es una enorme ventaja para el aprendizaje, asana y pranayama se aprenden mejor bajo el ojo vigilante de un maestro debido al contacto directo que se establece entre el maestro y el alumno.  El arte de ajustar es importantísimo cuando se aprende cualquier arte que involucre el uso del cuerpo. Por lo tanto, no hay ningún sustituto para un buen mentor: Te enseña sobre la alineación correcta, el uso correcto de los props, la secuenciación, la anatomía del movimiento aplicada, filosofía del yoga aplicada a la práctica, el lenguaje, la corrección verbal, la corrección manual adecuada sin infringir en el espacio personal de los alumnos, la observación y las modificaciones terapéuticas de acuerdo a las necesidades personales y retos de cada alumno. Un maestro, por más talentoso que sea como practicante, no puede saber todo esto por sí solo, y el aprendizaje toma años y nunca acaba con la ayuda de sus profesores y mucho estudio.

Hablando de principios éticos, que son comunes a todo el yoga sin importar la escuela, los Yamas,
Satya – Verdad o honradez
Asteya– No robar, son los que vienen a la mente, aunque todos aplican y se necesitan.
¿Qué es vivir en la verdad? Ser 100% auténticos.
¿Qué es exactamente robar?  robar es  tomar como propio lo que no nos pertenece sin reponerlo o dar algo a cambio. En el momento en que nos apropiamos de ideas ajenas o asumimos méritos que no son nuestros, vamos en contra de Asteya.

¿En que momento transgredimos satya y asteya en el camino de yoga? Cuando lo vemos como un negocio, más que como una forma de vida. El yogui necesita coherencia entre las palabras y las acciones para que su camino lo lleve a la luz, a la paz y al crecimiento.
Querer tener lo que el otro tiene nace principalmente de la incapacidad de ver nuestro propio valor.  A veces somos nosotros mismos los ladrones y las víctimas al mismo tiempo.

Las asociaciones Iyengar tienen un comité de ética por una razón: Cuidar el nombre Iyengar y la calidad de la enseñanza, y que el legado de la sabiduría de Guruji y familia se conserve lo más puro posible.

Y tú ¿te has cruzado con algún maestro Iyengar pirata?
¿Qué hacer si conoces uno?

1. Evitarlo, porque en el peor de los casos tu salud física y mental puede verse afectada con lesiones, o en el mejor de los casos, simple y sencillamente vas a obtener un aprendizaje de mala calidad.
2. Escribir al comité de Ética de la asociación Iyengar de tu país. A nadie nos gusta que nos engañen o roben.

¿Qué hacer si has usado el nombre sin tener la certificación?
Dejar de hacerlo, reflexionar cuál es tu propia fortaleza y comunicarla. Te puedes meter en problemas legales al ser una marca registrada y además no solo estas mintiendo a los demás, te estás mintiendo a tí mism@. Si esto no te importa, el yoga no es tu camino.
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Mónica Peón es maestra Iyengar certificada desde hace varios años. Da talleres además de clases privadas y grupalesvía zoom. Visita su página: https://iyengar.tribu.yoga
Más artículos e inspiración en IG: @monica_iyengar_yoga